Calle melancolía, Mexico...

Ahora no estás, esta mañana saliste como casi todas las que llevo aquí camino de la oficina, radiante, con esa cara que puede el cansancio pero que deja asomar toda la libertad, que permite iluminar el espacio, esa cara que contiene una mirada, una mirada que reduce los espacios, que ahoga las mentiras, que sufre con los te quiero, una mirada que revoluciona los sentidos, que cautiva a los villanos, que golpea en las heridas. Ahora no estás, sobre tu cama y bajo el agua deslizo mis dedos sobre las letras, intento componer palabras, pero nada me sale, hoy es un dia muerto, un dia agotado, ahora pasa un avión..., Este es mi tren, lo he cogido y no quiero soltarlo, este es nuestro tren, el tren de los sueños, de las ilusiones, el tren de lo auténtico, el tren sin otras vidas, sin mas caras que una, sin mas palabras que las sinceras... Hoy es otro dia, el último, o el primero, no lo sé, hoy desperte en Mexíco, mañana en el aire, el domingo en Asturies, allí, aquí, en el aire, se que te echo de menos, que te echaré de menos, los rincones, los silencios, los tacos, el tequila, los mojitos, las miradas, las risas, los momentos felices, tu piel, la fruta de la pasión, el aroma mineral que no es mineral, la manzana verde, los cítricos de tu perfume, esta noche, se que no estarás, el agua vuelve a inundarme y el peso de mi pecho me golpea, hoy se que no podré darte las buenas noches, hoy se, que soñaras con otras cosas, quizá eches de menos mi aroma, quizá mis caricias, o quizá mis besos, quizá te sientas aliviada, o dolida, quizá triste o alegre, quizá contenta o agobiada, quizá arrpentida o decidida, quizá amante o villana, quizá angel o demonio, quiza... Mañana se que no estarás, que no te veré radiante, que no sentiré tu calor, que no respiraré tus aromas, pero tambien se que estarás, estarás en mis miradas, en mis recuerdos, en mis palabras, estarás en mis momentos, ocuparás mis espaciós, revolucionarás mis miedos. Hoy hay agua, mucho agua, te quiero Reyes. Ojalá...

En un rincon de Mexico DF

Estoy aquí sentado en la cama que tantas veces había visto, pero que no sabía a que olía, me he encontrado con la taza, tambien con la torre iluminada, la que está sin iluminar, he recorrido los espacios y los tiempos, jugado entre mariachis y reido entre luchadores, pero sobre todo he descubierto los encantos de la fruta de la pasión que se entremezcla con la manzana verde, el clavo y la frescura del genjibre, la canela o la confitura de naranja perdida entre un aroma que recuerda a lo mineral pero que estoy seguro que no lo es, es casi una sensación mas que un aroma, bueno la verdad es que sensaciones me han regalado unas cuantas y todas envueltas de magia, esa sensación es un aroma tan personal que me resulta casi imposible de describir pero que podría ser el de sombras de luz, la escultura de Alba que situada en el Rinconin de Xixon mezcla cuando llueve, el metálico óxido con la tierra golpeada por el agua, el salitre del ambiente y los herbaceos que lo rodean, esa tierra es una nueva sensación tambien, aquella que tuve un dia al oler la mojada en Eivissa entre viñedos, ahí aparece la brasa húmeda de encina que en alguna ocasión empleé para hacer aceite ahumado y todo matizado con una de las flores que mas me gustan gastronómicamente, la del "arbeyu" (guisante). Sería capaz de perderme por cada uno de esos aromas para no volver a encontrarme nunca, es una sensación de sensaciones, un regalo entre un ciento, un fragmento en medio de un collage, un espacio en este camino en el que a veces me siento perdido y en otras no quisiera encontrarme. Llueve de nuevo sobre DF, he visto llover todos los dias desde que estoy aquí, es como si la ciudad necesitase la lluvia, sol, calor y lluvia, el dia tiene mucho espacio para acogerlo todo. Hoy sigo caminando, no se, creo que huele de forma especial Mexico...

Y de repente apareces tú... y aparezco yo

Reyes & Serxu

Tú sabes quien eres, y quien soy, tú sabes a quien dirijo mis palabras y también estas miradas... Yo, quizá no sepa lo que quieres... pero si cada uno de los sentimientos que te invaden en este instante. Tú, yo, dos almas dolidas, golpeadas por lo que algún día creímos amor... no eran más que mentiras con las que mancillarnos la cara, no eran más que palabras con las que regalarnos los oídos, no eran más que silencios para encontrar miradas cómplices que disfrazaran la pasión. Nosotros, tú y yo, amamos con todas nuestras fuerzas, somos almas sinceras en un ser debilitado... nuestra moral a veces marchita duele... en este momento tú sabes quien soy y yo quien eres, sabemos, que nos tenemos, que siempre nos tuvimos aún sin usarnos, que siempre estuvimos sin encontrarnos.

Visitamos sitios, y espacios, recorrimos caminos, vivimos en lugares, y fingimos vidas... hasta ahora. Y ahora, nos da miedo, tú sabes y yo se que fuimos almas dolidas, te asusta el terror del fracaso, y me atrapa el dolor del abandono. Pareciera que ese miedo nos defiende de una nueva mentira, que nos protege de nuevos silencios, que nos previene de nuevas palabras, ese miedo es profiláctico de nuevos besos... de otros besos, no de los tuyos ni de los mios, porque ahora yo se, y tú sabes, que esto no será mentira, que no fingiremos más vidas, somos silencios buscando sinceridad, somos palabras que no necesitan voz, somos miradas... somos risas que no engañan. Hemos dejado de ser, ya no seremos más almas dolidas.

Me pierdo en la soledad

Hoy me he levantado solo, cuando mis ojos se abrieron me di cuenta de que no había nadie, ni siquiera al otro lado de la pantalla como tantos días, la soledad comenzaba a golpearme una vez mas y no me apetecía, corrí hacia el parche a ver si os encontraba, pero tampoco atisbé a nadie, una nota decía ¡¡eres grande!! gracias hermano, ya no estaba, encendí el ordenador, lo conecté a la red y por un momento creí encontrarte, pero era una falsa ilusión, ahora acaba de marcar el Sporting, un poco de alegría en este gris día, que iniciaba soleado pero que ya está aquí como mi ánimo, en fin, la soledad me golpea demasiadas veces, en ocasiones voluntaria. Pero ahora, es cuando mas me pesa la distancia, cuando mas echo de menos los cojines,la pared chocolate, los sofás azules, el mar, el elogio enmarcado, la cúpula, la torre de la laboral, el puerto, de nuevo el mar, y también, la cuchara la taza, la torre iluminada, pero sobre todo tus miradas, tus palabras, tus silencios, tus sonrisas, tu comprensión, tu confianza, tu apoyo, aquí es ahora cuando mas falta me haces y no te tengo, aquí es ahora donde te necesito, y estas ausente y entonces la soledad me golpea, se ocupa de mis entrañas y me atraviesa como la espada seca del príncipe de dinamarca, y de mi vaso se desprende la última gota de agua que me quedaba, para dejarme invadir por la tristeza que no tiene sentido pero que si me invade. Ahora no hace sol, ya la luz acompaña el momento, el alma es gris, la luz también. Yo se que lloverá, desconozco si ahora o luego, pero lo hará y espero que cuando lo haga, se lleve con ella las aguas turbias que ni hoy, ni mañana ni nunca quiero volver a tener dentro, pero que a veces se empeña en alojarse en mí, ahora llueve por dentro, incluso un poco por fuera, pero no en la calle. Que lejos, que difícil es todo, y me pregunto, por que a mi me pasa esto. Ya duraba mucho la alegría, nos empata el Almería.

Descubriendo el paraiso

Hoy me he adentrado un poco mas en el paraíso, ese espacio que estaba cerrado, en el que el paso del tiempo desgasta algunos de sus lugares, ese lugar que era un refugio. Hoy ha caído una nueva puerta, primero fue un vestido, luego una mano, antes un miedo y poco a poco todos los muros, los pequeños, los grandes, los que marcan el pasado, los que ya no tienen sentido, aunque lo tuvieron, aunque no fueron comprendidos, ahora ya no, por que el recorrido por el paraíso sigue su camino, hoy se perdieron un poco algunas de las tazas, también una de las sillas, incluso la torre cuando no está iluminada, hoy hay elementos del paraíso que ya tienen menos peso, por que a este viaje han llegado nuevos pasajeros, hoy estoy lleno de ti, de tus cosas, de tus momentos, hoy hay bolis, bambú, hoy hay fotos reales, y desde hoy echare de menos, la mesa blanca, los pomos lila, las piedras y las caracolas, el altavoz para tirar que se entrecorta, la paz de tus paredes, el chocolate de la habitación en forma de pintura,las sillas en las que los dos estuvimos sentados, los libros que los dos tocamos, la funda nórdica, la cama, ahí estuviste, tú, ahí estoy yo, tus aromas, hoy estoy un poco mas cerca, si, también por que ya está ahí el 22, pero sobre todo por que se un poco a que hueles, por que tengo tus vistas, por que se un poco mas quien y como eres, por que hice un poco mio tu espacio, por que te escribo desde el castillo, desde la torre mas alta, donde ahora esta el rey de Reyes, hoy estoy un poco mas dentro de tí por que participo en tu vida, por que dejaré mi olor en tus rincones, porque ya no todo estará como lo dejaste, porque te he tenido un poco mas en mis manos, hoy se que hemos dado un nuevo paso, hoy se mas que nunca, que eres tú.

Vacios repletos de felicidad ¿se entiende?

Los sentimientos a veces son incomprensible, nuestra mente hay ocasiones en las que circula sola, libremente sin pensar en nada ni en nadie y dándole igual donde, con quien estés, a que hora, en que ocasión, hoy es uno de esos días en los que debería de ser plenamente feliz, y yo creo que si lo soy, pero mi mente ha querido golpearme hace cinco minutos, de alguna manera, a las 20 horas cuando Maeve se iba y miré el asiento de al lado, eche mas que nunca de menos a las tazas, las cucharas, la terraza, la torre iluminada, las tardes en las que es madrugada y sobre todo las miradas cómplices, los silencios, su sonrisa, sus palabras, eché de menos ese momento en el que con solo mirarnos sabemos lo que decimos, me encontré vacío, ahora estoy aquí vertiendo sobre el teclado esta reflexión, mientras espero que la ducha haga su trabajo y que ese a veces molesto ruidito golpee mis oídos para dejarlo todo y verla, así, cuando todo es increíble, hoy que todo ya es oficial, que la seguridad dejó paso al resto de las cosas, enterrando los miedos, sabiendo que aquí todo es definitivo,para quedarse, para hacerse feliz, hoy, el vacío me golpea, se que dentro de diez o veinte minutos todo estará solucionado por que mis tazas y mis cucharas, hoy quizá no vengan pero si estará la silla, y pronto vendrá la torre iluminada, seguramente tenga voces y palabras que en esta noche nos acompañen probándonos un poco de nuestro espacio pero participando de nuestra alegría. Hoy aunque ahora me sienta un poco vacío se que soy feliz, por todo lo que sucede, y también por lo que va a suceder, no se, es extraño, pero en muchas ocasiones siento que este vacío es producto de esa sensación de haberte tenido siempre a mi lado, es genial, saber que nos queda mucho camino y que todo va sobre ruedas, afianzándose sobre pilares fuertes y con una buena base de hormigón de calidad y ferralla, esta vez se que sí, que no caerán de mis miradas mas aguas, que no se perderá parte del bombeo de mi caja, se que esta vez, tú vas a estar y yo seré feliz por que cada mañana te veré sonreír. Tú con tu magia, harás que esto sea lo que ya es, algo único, y nos dará igual que nos entiendan o no, nos dará igual todo por que seremos nosotros y con ello no va a poder nadie, ni siquiera los vacíos de esos momentos distantes, que también distintos. Gracias por todo lo que ya tengo y lo que me vas a dar, gracias de verdad.

Una tarde que era madrugada

Hubo un día que lo soñé, pero no fue ayer, una ocasión en la que me imaginaba las cosas pero no fue ayer, ayer era de tarde, pero también de madrugada, las tazas estaban guardadas, y se dejaba ver la lima, junto al sal, golpeando al tequila, uno de esos de doce años, para una persona doce años no son nada, hubiese estado hablando con una niña, para un tequila es mucho. Ayer era de madrugada, pero también era de tarde, había voces, canciones de fondo, risas, palabras, llamadas, ausencia de imágenes, presencia de miradas, intuía la silla clásica, luego la azul, vi atardecer mientras era de madrugada, escuche su risa, entre en su cocina, disfruté de su ensalada y seguían las canciones, las otras palabras, las llamadas, la ausencia de miradas, la presencia de imágenes y entonces pasó, el sueño se hizo realidad, ya no era de tarde, seguía siendo de madrugada, ya anochecia, pero seguía siendo de madrugada. Ya no había tequila, ahora había imágenes, pero también miradas, silencios cómplices, deseo, canciones, palabras, no volvieron las tazas, esta vez tampoco las cucharas, su espacio lo ocupaba la corona que en mano tenía no el rey si no Reyes, si quiero le dije, ella solo me miraba, su sonrisa dibujaba la felicidad en su cara, yo aquí sigo, esperando que lo que había soñado, esta vez no fuera un sueño.

Love is in the air

Podría titularme de muchas maneras, pero quien me escribe así lo ha decidido, y todo tiene su razón de ser, hay infinidad de ocasiones en las que las cosas suceden por que tienen que suceder y esta historia comienza un 7-8 de abril del año 2009, ellos no contaban con ello, bueno él un poco mas que ella, pero cuando se miraron por primera vez algo pasó, algún tipo de fuerza extraña hizo que conectasen y se convirtiesen en ese volcán que hoy son, si todo un volcán lleno de distancias, y dificultades, repleto de cucharas y terrazas, complementado por buenas vistas de sombrillas, tejados, pasillos de hoteles unos y otros lugares, adornado con tazas, perritos, miradas cómplices, voces extrañas, lágrimas y sonrisas y también sonrisas y lágrimas, incluso, gripes porcinas, terremotos, ferias y palabras. Esta historia, no es habitual, es mas para muchos y muchas de los que deslizáis ahora las miradas sobre estas letras seguramente pensareis que es falsa, extraña, loca, no se.Quien me está escribiendo lo sabe y por eso le parece algo habitual, del día a día, de toda la vida. Hay momentos de trenes a los que subirte, otros de palabras pasads que se dicen, pero son mentira, que se creian que se sentían, otros de viajes de regreso anhelados en los que sientes que le has fallado, otros en los que los nervios se apoderan del instante aeropuerto, mascarilla, vestido y todo lo que le envuelve. Pero lo mejor es cuando recibes mucho mas de lo habías pensado recibir, hay un día en Puerto Vallarta que marca un nuevo tiempo, uno de esos instantes, en los que ya estas seguro de todo, en el que te das cuenta de que mientras te cae una lágrima, las cucharas, las sombrillas, las tazas, las torres, las terrazas, los momentos flores, los silencios, las miradas, las piscinas, los cielos claros, las gripes raras, los terremotos, las ferias, incluso la colada, la puerta rota, el cabecero y la cama, un momento en el que te das cuenta que ya estás ahí alojado y que no piensas moverte, ahí, está el personaje de esta historia, y supongo que también la personaje. Hoy es el día en el que las palabras recibidas se convierten en papel y Puerto Vallarta llega en ese que se puede quemar, que se puede llevar el viento, que se puede romper, que se puede tantas cosas como algunas de sus palabras, pero que significa mas que todo lo que pueda hacerse con él, y ahí esta guardado en la carpeta Reyes, junto al resto de momentos que viven y esperando a los que sin lugar a dudas un día de estos llegarán. La cuestión es,con lo fácil que es ser feliz, ¿por que a veces lo ponen tan difícil? y sobre todo ¿por que hay gente que se empeña en no serlo?