10.5.09

Me pierdo en la soledad

Hoy me he levantado solo, cuando mis ojos se abrieron me di cuenta de que no había nadie, ni siquiera al otro lado de la pantalla como tantos días, la soledad comenzaba a golpearme una vez mas y no me apetecía, corrí hacia el parche a ver si os encontraba, pero tampoco atisbé a nadie, una nota decía ¡¡eres grande!! gracias hermano, ya no estaba, encendí el ordenador, lo conecté a la red y por un momento creí encontrarte, pero era una falsa ilusión, ahora acaba de marcar el Sporting, un poco de alegría en este gris día, que iniciaba soleado pero que ya está aquí como mi ánimo, en fin, la soledad me golpea demasiadas veces, en ocasiones voluntaria. Pero ahora, es cuando mas me pesa la distancia, cuando mas echo de menos los cojines,la pared chocolate, los sofás azules, el mar, el elogio enmarcado, la cúpula, la torre de la laboral, el puerto, de nuevo el mar, y también, la cuchara la taza, la torre iluminada, pero sobre todo tus miradas, tus palabras, tus silencios, tus sonrisas, tu comprensión, tu confianza, tu apoyo, aquí es ahora cuando mas falta me haces y no te tengo, aquí es ahora donde te necesito, y estas ausente y entonces la soledad me golpea, se ocupa de mis entrañas y me atraviesa como la espada seca del príncipe de dinamarca, y de mi vaso se desprende la última gota de agua que me quedaba, para dejarme invadir por la tristeza que no tiene sentido pero que si me invade. Ahora no hace sol, ya la luz acompaña el momento, el alma es gris, la luz también. Yo se que lloverá, desconozco si ahora o luego, pero lo hará y espero que cuando lo haga, se lleve con ella las aguas turbias que ni hoy, ni mañana ni nunca quiero volver a tener dentro, pero que a veces se empeña en alojarse en mí, ahora llueve por dentro, incluso un poco por fuera, pero no en la calle. Que lejos, que difícil es todo, y me pregunto, por que a mi me pasa esto. Ya duraba mucho la alegría, nos empata el Almería.