10.4.09

Viajando por el paraiso

Siento mucho defraudaros a los que esperáis en este artículo alguna de mis crónicas o críticas a cerca de nuestro paraíso natural - Asturies - pero es que para mí el viaje que realicé ayer,fue al paraíso, a un espacio que buscaba desde hacía mucho tiempo, por el que creí viajar fugazmente hace un par de meses y el cual solo fue una prueba mas para que valorase lo que me viene a partir de ahora, ayer estuve recorriendo desde una terraza las mejores vistas, desde un salón las mejores miradas, ayer estuve disfrutando de la belleza del paraíso y de los silencios de la vida, de la complicidad del que no necesita hablar, de la inteligencia de quien lo dice todo con tan solo un gesto, una mirada, del día y de la noche, de una taza, de una cuchara, de un plato, de un gesto, de la luz de una torre, del anochecer de un país extraño, de un perro, de unas voces que rompían el canto de los pájaros, de lo extraño, de lo que estando muy lejos, está cada vez mas cerca. Ayer vi la luz al otro lado del río, ayer sentí que el cuerpo de nuevo se revolucionaba pero para quedarse sentado definitivamente. Dicen que la distancia es el olvido, pero a veces es también la energía que necesitas para cometer locuras, el espacio para que el rumiante termine de digerir su alimento, el silencio para conseguir convertirse en Rey de Reyes. Cuando los locos se encuentran el mundo tiene que temblar, por que no hay nada mejor que dos locos cometiendo locuras, no hay nada mejor que dos locos queriendo vivir la vida, no hay nada mejor que dos locos dispuestos a conseguir algo, no hay nada mejor, que mirarse a la cara y estar seguro de todo y saber que poco a poco, el día le ira pudiendo al frío, por que he visto una luz al otro lado del río, y no voy a detenerme hasta que esa luz, esté aquí a mi lado, conmigo, por que oigo una voz que me llama, casi un suspiro. Te estaba buscando, llevaba largo tiempo y te encontré y ahora quiero que sepas que no voy a dejar que te vayas.